Hice con mi intento de olvidarte lo mismo que hago cuando tengo una herida, que la toco de vez en cuando para saber si sigue doliendo. Pensaba en ti solo para ver si seguías doliéndome. Lo hacía por instinto, porque necesitaba saber que aún podía sentir dolor.
"A veces me gustaría correr a buscarte y preguntarte si de verdad has sido más feliz, si valió la pena"
No hay comentarios:
Publicar un comentario