No tienes otra oportunidad, la vida no es como un juego de la Nintendo

La vida empezó a cambiar, la situación es igual, un sentimiento lleva a otro, empezáis a pensar que quizás esa monotonía os esté afectando, pues las peleas a diario ya son un calvario. Se derrumbó, os ató, ya todo se esfumó, se consumió, su amor ya se largó, y el tuyo igual, lo notas cuando le besas, esa pasión que existía empezó a saber a tristeza. Él es consciente de que ella no es el problema, pero empezáis a hablar y siempre evadís el tema, porque te duele, porque sabes que él te amaba, pero no era lo que esperabas. Te duele pensar si en realidad era él el hombre con el que querías compartirlo todo, besaste a sapos, buscaste de lado a lado, pero entiende que no siempre el primer príncipe es el indicado. ¿Quieres decirle que esto no funciona verdad? Pero recuerdas los buenos ratos y empiezas a dudar, te duele aceptar que esto va muy mal, quieres asimilar que es una etapa y luego se pasará, pero eso pensasteis ya hace meses, meses que notasteis cómo vuestro amor se desvanece, a veces es mejor desde el inicio, aceptar que esto ya no funciona, enviarlo a un precipicio. Pero es difícil, no tenéis el valor para aceptar que vuestro amor se ha convertido en dolor, de tanto buscarlo terminasteis de tenerlo, un cuento de hadas convertido en un infierno.