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sábado, 30 de marzo de 2013

Olvídate de todo

A veces pienso que habría que dejar que todo pase solo, que las cosas ocurran, que el destino siga su curso para ver qué te depara. Otras veces pienso que tienes que luchar y procurar conseguir lo que quieres con todas fuerzas. Pero cuando miro hacia atrás nunca sé reconstruir lo que realmente ha pasado, averiguar las causas o razones que me han llevado a comportarme de cierta manera. Entonces vuelvo a hacer planes de futuro y siempre tengo dos ideas contrarias en la cabeza: una me dice que deje que las cosas pasen; la otra, que luche. Y al final no hago ni una cosa ni la otra, sigo decidiéndome entre las dos. Pero ahora he comprendido que eso es lo que vale, que así seré siempre, pues de no haberme comportado de ese modo, ahora mismo no sería quien soy.

jueves, 21 de marzo de 2013

Ya no sale nada bien

Tengo tantas cosas que decir que ni siquiera sé por dónde empezar. Ya no sé ni qué escribir, ni cómo decir las cosas, ya no sé qué hacer para que todo vuelva a ser como antes, para que yo vuelva a ser la misma. Todo ha cambiado, yo he cambiado, me disfracé de alguien que no era yo, y supongo que estuve tan pendiente de otras cosas que no me daba cuenta. Puede que no sea lo que esperabas, puede que ya no sea ni lo que yo misma esperaba de mí. Y ahora tengo miedo de todo, de no llegar a nada en la vida, miedo de que tú me dejes. Es como si nada funcionara sin ti. 


miércoles, 20 de marzo de 2013

Nunca creí en muchas cosas

Alguna vez te darás cuenta de las cosas y sabrás que la persona más importante para alguien es uno mismo.


viernes, 15 de marzo de 2013

Yo no puedo luchar contra el pasado, pero puedo arreglar el presente

El tiempo sigue arañando mi corazón sincero. Y no me apetece soltar más lágrimas que se sequen cuando se rompen en el suelo. No quiero sufrir más por estos sentimientos que me empujan a un vacío desconsolador, sin besos.
Estás en cada uno de mis sueños y en cada uno de mis anhelos. Estás en mis ilusiones y estás en mis miedos. Estás al final de mi camino, en el horizonte de mi deseo. Sin embargo, yo quiero que estés aquí, en este momento. Y en todos los momentos. Y no te veo. No, no te veo.
¿Por qué es tan difícil? ¿Por qué no me atrevo a ir más allá de estos estúpidos textos? Tú sigues con tu vida y yo continúo mi paseo por la orilla de mi sombra, que oculta mi verdadero secreto.
Me encantaría que recogieras cada uno de los pedazos de mi corazón y los acariciaras haciéndolos tuyos. Quiero ser para ti, y que me quieras tanto que le duela al dolor. Ojalá fuera así. Ojalá me atreviera a robarte un beso y a mirar hacia el futuro en tu mismo espejo. Un futuro sin miedos.
No sé qué hacer, cómo hablarte, qué decirte. Si me atreviera a contarte cómo pienso, cómo quiero...Si me atreviera a buscar en tus ojos lo que tanto, y tanto, y tanto dolor me causa...Da lo mismo, porque esto seguiría así, porque soy cobarde. Porque aunque diga lo contrario a los cuatro vientos, soy incapaz de atreverme a revelar mi auténtico yo. Soy como una tortuga pequeña en medio del desierto. Sin agua, sin fuerzas, sin seso. Dentro de un caparazón demasiado pequeño y del que no sé salir, en el que poco a poco me muero. Necesito razones y tu mano para tirar de mí y demostrarle al mundo que existo. Que existimos. Aunque sea en pleno desierto.

jueves, 14 de marzo de 2013

Hay muchas cosas que no se pueden cambiar

Si no tuviera una cadena que limita mis movimientos podría alcanzar el sueño de amar. De cogerte de la mano sin miedo y recorrer contigo el mundo sin que nadie nos moleste. De perderme en tus ojos y decirte que te quiero, que no puedo pasar ni un día sin ti.
Si no tuviera pánico a escuchar tu respuesta, sería capaz de gritar en nuestros silencios que te amo. De saltar la barrera que nos separa, que condiciona todo lo que siento por ti. Me impondría a cualquier adversidad si supiera que tú sientes lo mismo.
Si no tuviera razón al creer que lo nuestro es imposible, pensaría que dos más dos pueden ser cinco y que los globos también vuelan sin helio. Que las gaviotas saben vivir lejos del mar y que las nubes lloran porque no las dejan ver el sol.
Si no tuviera un secreto en el que me dedicara a esconder lo que siento, escribiría en tus sábanas mi pensamiento. Anotaría cada dictado en tus labios e imaginaría que cada beso es el mejor que has dado nunca. Dibujaría una línea infinita en tu espalda que hiciera que me perdiera en lo más profundo de tu horizonte.
Si no tuviera tantas ganas de quererte, abandonaría esa idea un instante. Derrocharía mis lágrimas en historias de mi estúpido día a día. Buscaría un armario del que sacar toda la ropa que nunca me pongo. En realidad, moriría si ya no me quedaran ganas de quererte.

Desde ese día

Descubren que tienen varios gustos en común y hasta se atreven a compartir algunos de sus miedos. El resto del mundo los ignora o los toma a broma. Son dos jóvenes que se salen de los tipos y prototipos habitualmente aceptados. Son dos auténticos incomprendidos. Pero ellos, los dos unidos, se entienden, y lo supieron desde aquel día que hablaron por primera vez.

miércoles, 13 de marzo de 2013

¿Alguien que me rescate?


Que venga a por mí y me recoja en sus brazos amables. Que me diga que hoy soy especial. Que no haga que me esconda de lo que llevo dentro. Que me apriete fuerte y me sonría con amor.
Mi secreto pesa. Lo llevo atado al cuello con una soga que cada día aprieta un poco más. Siento esa cuerda invisible cuando ando, cuando tiemblo y cuando estoy en mi cuarto en la soledad de una noche que no me deja dormir.
Quisiera ser feliz, pero no puedo. No puedo. Y prometo a todo el mundo que quiero: quiero ser feliz. De verdad. Pero, ¿puede serlo alguien sabiendo que no puede tener lo que más desea?

lunes, 11 de marzo de 2013

Olvídate del mundo y quédate a mi lado


-¿Entonces entre tú y yo hay algo?
-No lo sé.
-Vale…mira, no sé si debería contarte esto, pero lo que sí sé es que cada vez que entro a alguna habitación reconozco tu olor, y que después de todo este tiempo así, sé que te quiero. 

Tal vez haya encontrado lo que nunca he buscado, pero sí a quien necesitaba

Algún día me cansaré de decirte que estoy bien, y te diré al oído que estaría mejor contigo.

sábado, 9 de marzo de 2013

"Nunca digas nunca"


-Tengo algo importante que decirte y quiero que tengas la seguridad de que no es una broma. El otro día me dolió muchísimo lo que dijiste sobre mí. Somos amigos desde hace mucho tiempo y eres la única persona que ha creído en mí y me ha apoyado al cien por cien. Creía firmemente que me conocías y que eras capaz de ver en mi interior, pero lo que dijiste me devolvió una imagen de mí que no me gustó nada. Me horrorizó que me vieras como un tío insensible al que lo único que le importa es su físico. Le he dado muchas vueltas estos días y me cuesta creer que en todos estos años lo único que hayas sacado de mí sea eso, porque no se ajusta en absoluto a la realidad. Sé que parece que soy muy superficial y que todo me da igual, pero pensé que tú eras capaz de ver más allá. Lo que quiero decirte es que me he derrumbado, porque llevo tiempo esforzándome en mejorar, intentando centrarme y madurar, y es que pensé que de ese modo podría llegar a…no sé…a gustarte y a empezar algo juntos. Siempre me dices que es un error enrollarse con las amigas porque todo se estropea y que soy especialista en romper amistades, pero no quiero que solo seas mi amiga, no puedo soportarlo. Llevaba meses pensando que lo nuestro podría funcionar y sintiendo que cada vez estábamos más cerca y que poco a poco tú también ibas sintiendo algo por mí, pero ya no sé qué pensar. A lo mejor te parezco un imbécil por decirte todo esto, pero tenía que hacerlo. No sé qué va a ser de nosotros a partir de ahora, pero necesitaba contártelo: estoy enamorado de ti. No puedo callármelo más. Me encanta lo lista que eres, me vuelve loco esa forma de ser tuya, de llevarte bien con todo el mundo, de ayudar siempre a los demás sin pensar en ti, me gusta tu sentido del humor, y tu sonrisa permanente. Te quiero niña, y desde hace mucho tiempo llenas toda mi vida.
-Yo…no sé por dónde empezar. Supongo que en primer lugar quiero pedirte perdón por lo que te dije. Ni por asomo lo pienso, solo quería fastidiarte un poco, pero me pasé y siento muchísimo que te doliera tanto. No pienso que solo seas un tío guapo, tampoco creo que seas superficial…pero tenemos maneras distintas de ver la vida. Tú vives el momento, disfrutas del instante y tu proyección en el tiempo no pasa de los dos días. Y ya sabes cómo soy yo, que necesito tenerlo todo controlado y pensar las consecuencias de todas las cosas, por mínimas que sean. Sé que soy una obsesa del control, pero no puedo evitarlo, igual que tú no puedes evitar pensar en el aquí y ahora. Me encantaría aprender de ti para disfrutar más, pero en cuanto levanto los pies del suelo, me da miedo y vuelvo a agarrarme con fuerza para no perderme. Estoy hecha un flan, porque creo que lo nuestro se desquebraja y no quiero perderte. Si te pierdo me voy a arrepentir el resto de mi vida porque tú eres lo mejor que tengo y te necesito muchísimo, porque nadie me cuida como tú lo haces, ni me mima tanto, ni me llena de atenciones, ni me ve tan especial. Y mil veces me pregunto qué será lo que ves en mí, porque no soy ni la cuarta parte de lo que tú eres. Eres inteligente, divertido, eres bueno, cariñoso… Y aunque sabía que algún día íbamos a tener que sentarnos a hablar de nosotros, no quería que llegara ese momento, porque ya nada va a ser igual que antes y a mí me gustaba mucho, y de momento me bastaba...porque me asusta tener algo más contigo. El caso es que estoy hecha un lío, porque llevo mucho tiempo soñando que pase esto, pero ahora, si pudiera, daría marcha atrás para que todo siguiera como antes…Oye, ¿me estás escuchando? - Él sonrió y comenzó a fingir que roncaba - ¿Te estás riendo de mí? ¿Has escuchado lo que te estaba diciendo?
-Sí, te he escuchado, pero no has dicho nada de lo que quiero oír…
-¿Y qué quieres oír? – preguntó con la voz entrecortada.
Él acercó los labios a su oído y susurró:
-Te quiero, eso es lo único que tienes que decir.
-Pero…
-Dímelo – susurró – Dime que me quieres.
-Te quiero – dijo al fin – Te quiero, te quiero, te quiero…

jueves, 7 de marzo de 2013

"El amor es lo que tiene"

Hay algo en la forma en la que se ríen juntos, la forma en que hablan, en que se miran, la forma en la que siempre parecen apoyarse el uno al otro cuando las cosas se están desmoronando. Entonces, ¿qué es lo que siempre se interpone entre ellos?

lunes, 4 de marzo de 2013

Sé que algún día todo cambiará

Tienes que comprenderlo, yo no soy nada especial. Solo soy una chica normal, y soy del montón en muchas cosas. Pero tengo un secreto. Aunque construyan murallas que lleguen hasta el cielo, yo encontraré la forma de volar sobre ellas. Aunque intenten atraparme con cientos de armas, yo encontraré un modo de resistir. Y hay muchos como yo ahí fuera. Gente que se niega a dejar de creer que el mundo pueda ser de otra manera.

sábado, 2 de marzo de 2013

No sé si sabes quién eres hasta que te pierdes a ti mismo

Creo que cuando todo ha llegado a su fin, se repite en flashes. Es como una caja de recuerdos, todo vuelve, pero él nunca lo hace. Creo que una parte de mí sabía al segundo que le vi qué iba a pasar. En realidad no es algo que él haya dicho o haya hecho, era la sensación que me envolvía. Y lo más loco es que no sé si volveré a sentirme así otra vez, no sé si debería. Sabía que su mundo se movía de manera diferente, y que brillaba como el sol, pero pensé "¿Cómo puede el diablo empujarte a los brazos de alguien que cuando sonríe parece un ángel?" Creo que la peor parte de todo no fue perderle a él, sino perderme a mí.